Síndrome de Ícaro

En la mitología griega existe un joven ingenuo e inocente llamado Ícaro, cuyo mito conmovedor y trágico está hoy en día atribuido a un síndrome peculiar, pero presente llamado el Síndrome de Ícaro. En este breve pero interesante artículo explicaré la relación que presenta la historia de este joven con la medicina.

Ícaro era un joven aventurero hijo de Dédalo, quien sabemos que se trata del arquitecto que construyó el laberinto en el que se encontraba el famoso y aterrador Minotauro. Este muchacho sufrió las consecuencias de los actos de su padre y fue encerrado con él en el laberinto. Después de días sobreviviendo en esa espantosa cárcel, su padre inventó un artilugio que podría resultar en la liberación tanto de él como de su hijo: unas alas compuestas por plumas y juntadas con cera. El hombre las probó y al ver que, en efecto, funcionaban, instruyó a su hijo en su uso y los peligros que conllevaba. A continuación se pusieron en marcha, uno detrás del otro, atravesando islas y volando por encima de los mares, hasta que Ícaro, ensimismado por las vistas , comenzó a subir cada vez más y el calor que radiaba el sol empezó  a derretir la cera que formaba sus alas. Así pues, el vuelo se le volvió inestable y no pasó mucho tiempo hasta que Ícaro cayó, cielo hacia abajo, hasta aterrizar sin aliento en el largo y profundo mar.

Ahora bien, te estarás preguntando, ¿cómo es posible que este mito tenga relación alguna con una enfermedad? Bueno, la respuesta es simple, el mito nos ofrece una visión de Ícaro en la que podemos ver característicos rasgos como el exceso de confianza, impulsividad y el hecho de ser demasiado ambicioso, sin pensar en los peligros y consecuencias que conllevan tus acciones. Entonces, las personas que sufren de este síndrome suelen presentar las características mencionadas anteriormente, así como también tienen un elevado narcisismo y una "incapacidad para escuchar en forma asertiva los consejos sobre la precaución y el equilibrio de las cosas", como menciona textualmente un artículo sobre este síndrome. Además, tanto jóvenes como adultos pueden sufrirlo, y muchos estudios afirman que al igual que el mito, este síndrome lleva al fracaso en varios aspectos de la vida. Desgraciadamente, no existe una cura para esta enfermedad, solo un gran trabajo emocional y espiritual puede controlarlo hasta cierto punto.

 

WEBGRAFÍA

https://www.elsoldepuebla.com.mx/circulos/sabes-que-es-el-sindrome-de-icaro-o-de-los-quemados-7547966.html